Al darse a conocer un video que muestra el arresto de un supuesto delincuente en el que al parecer se utiliza de manera excesiva el uso de la fuerza por parte de agentes del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), activistas comunitarios recordaron el caso de Rodney King y pidieron el encarcelamiento de los dos agentes que realizaron la detención hace tres meses.
Police Brutality - video powered by Metacafe
En la grabación aparece un agente, identificado como Patrick Farrell, lanzando cinco golpes —dos fallidos— a la cara de William Cárdenas, un joven de 23 años que gritaba insistentemente "¡I can’t breathe!" ("¡No puedo respirar!"), por la rodilla que le ponían en el cuello, mientras otro policía, Alexander Schlegel, está encima del detenido tratando de sujetarle los brazos.
Según Paul Vernon, teniente del LAPD, Cárdenas es un conocido pandillero que intentó huir de la policía y que se resistió al arresto cuando los dos agentes cumplían con la orden de aprehensión que tenía por recibir artículos robados.
El teniente Vernon aseguró que el LAPD es el departamento policiaco más transparente y progresista de EU y que sólo requieren de la confianza de la gente para esclarecer este tipo de casos.
Pero para Najee Alí, activista afroamericano, lo que aparece en el video es un acto de barbarie.
"Sentimos que los policías deberían estar en la cárcel, arrestados y procesados criminalmente por asalto y lesiones. No hay excusa para haber golpeado a este joven de la forma como lo hicieron", dijo ayer en conferencia de prensa.
Y agregó: "Esto es como el caso de Rodney King otra vez. Estamos viendo que los latinos y los negros están siendo víctimas del abuso policiaco en muchas ocasiones. No vemos que la policía esté golpeando a los blancos en los vecindarios blancos, ellos van a las comunidades minoritarias a intimidar a nuestra gente. Es un caso más de brutalidad policiaca".
El jefe del LAPD, William Bratton, declaró que ya se está llevando a cabo una investigación interna y que desde hace un mes a los agentes no se les permite patrullar las calles y fueron asignados a puestos administrativos.
Las investigaciones internas del Departamento de Policía, criticó Najee Ali, no conducen a resultados, como pasó con el caso de Susie Peña, la niña muerta a balazos durante una intervención del equipo SWAT hace ya más de un año.
"No importa lo que haya dicho el jefe Bratton sobre que están investigando. No confiamos en las investigaciones que se hace a sí mismo el LAPD. Por eso estamos demandando que el procurador de Distrito, Steve Cooley, muestre coraje y haga lo correcto, que arreste y procese a esos agentes por asalto y lesiones", insistió el activista.
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) informó que está investigando a los dos oficiales por la posible violación de derechos civiles.
Las autoridades dieron a conocer que uno de los agentes ya había estado involucrado hace tres años en un caso de abuso policial.
Eran alrededor de las 5:00 p.m. del viernes 11 de agosto cuando Arlene Pacheco estaba tomándole fotografías a su gato afuera de su casa. De pronto vio a policías que correteaban a un joven, quien metros más adelante, en la intersección de las calles Beachwood y Fountain, en Hollywood, fue alcanzado y sometido en el suelo.
Arlene, junto con un grupo de estudiantes que se encontraban por ahí jugando, se acercó para ver la detención de Cárdenas y empezó a tomar video con su misma cámara digital de fotografías.
La cámara sólo pudo grabar tres secuencias en la tarjeta de video, dos de cuatro segundos, que sólo muestran a William Cárdenas en el suelo, y una de 19 segundos, que es donde se observan los golpes en el rostro del detenido.
"Después llegó un policía tratando de explicarme lo que pasó, que se trataba de un delincuente y que lo habían tratado de encontrar por mucho tiempo, pero que había querido huir", contó a La Opinión la autora del video. "Después llegó un hermano del hombre arrestado y me dijo que iba a poner una queja en contra de la ciudad por lo que le habían hecho a su hermano y le di una copia a la familia. Ya después no supe cómo apareció en internet".
Además de los gritos de que no podía respirar, en la grabación también se alcanzan a escuchar algunas voces de testigos de la detención, que les reclamaban a los policías del LAPD por los puñetazos que le daban a Cárdenas.
Kwaku Duren, abogado de Cárdenas, comentó que fue él quien decidió colocar el video en internet ante la negativa de las autoridades de negociar un arreglo para no ir a una demanda civil.
Reconoció que lo que hizo su cliente al intentar huir estuvo mal, pero que eso es un delito menor que no merece el excesivo abuso de la fuerza policiaca.
El defensor presentó una serie de fotografías en las que se observan las lesiones que sufrió Cárdenas y por las cuales tuvo que ser hospitalizado, según dijo.
Actualmente William Cárdenas se encuentra preso en el Centro de Detención de Pitchess, y el próximo 27 de noviembre se presentará a juicio por resistirse al arresto.
De acuerdo con Duren lo anterior es un delito menor.
Y advirtió el abogado: "Vamos a demandar al LAPD por uso excesivo de la fuerza".
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En la grabación aparece un agente, identificado como Patrick Farrell, lanzando cinco golpes —dos fallidos— a la cara de William Cárdenas, un joven de 23 años que gritaba insistentemente "¡I can’t breathe!" ("¡No puedo respirar!"), por la rodilla que le ponían en el cuello, mientras otro policía, Alexander Schlegel, está encima del detenido tratando de sujetarle los brazos.
Según Paul Vernon, teniente del LAPD, Cárdenas es un conocido pandillero que intentó huir de la policía y que se resistió al arresto cuando los dos agentes cumplían con la orden de aprehensión que tenía por recibir artículos robados.
El teniente Vernon aseguró que el LAPD es el departamento policiaco más transparente y progresista de EU y que sólo requieren de la confianza de la gente para esclarecer este tipo de casos.
Pero para Najee Alí, activista afroamericano, lo que aparece en el video es un acto de barbarie.
"Sentimos que los policías deberían estar en la cárcel, arrestados y procesados criminalmente por asalto y lesiones. No hay excusa para haber golpeado a este joven de la forma como lo hicieron", dijo ayer en conferencia de prensa.
Y agregó: "Esto es como el caso de Rodney King otra vez. Estamos viendo que los latinos y los negros están siendo víctimas del abuso policiaco en muchas ocasiones. No vemos que la policía esté golpeando a los blancos en los vecindarios blancos, ellos van a las comunidades minoritarias a intimidar a nuestra gente. Es un caso más de brutalidad policiaca".
El jefe del LAPD, William Bratton, declaró que ya se está llevando a cabo una investigación interna y que desde hace un mes a los agentes no se les permite patrullar las calles y fueron asignados a puestos administrativos.
Las investigaciones internas del Departamento de Policía, criticó Najee Ali, no conducen a resultados, como pasó con el caso de Susie Peña, la niña muerta a balazos durante una intervención del equipo SWAT hace ya más de un año.
"No importa lo que haya dicho el jefe Bratton sobre que están investigando. No confiamos en las investigaciones que se hace a sí mismo el LAPD. Por eso estamos demandando que el procurador de Distrito, Steve Cooley, muestre coraje y haga lo correcto, que arreste y procese a esos agentes por asalto y lesiones", insistió el activista.
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) informó que está investigando a los dos oficiales por la posible violación de derechos civiles.
Las autoridades dieron a conocer que uno de los agentes ya había estado involucrado hace tres años en un caso de abuso policial.
Eran alrededor de las 5:00 p.m. del viernes 11 de agosto cuando Arlene Pacheco estaba tomándole fotografías a su gato afuera de su casa. De pronto vio a policías que correteaban a un joven, quien metros más adelante, en la intersección de las calles Beachwood y Fountain, en Hollywood, fue alcanzado y sometido en el suelo.
Arlene, junto con un grupo de estudiantes que se encontraban por ahí jugando, se acercó para ver la detención de Cárdenas y empezó a tomar video con su misma cámara digital de fotografías.
La cámara sólo pudo grabar tres secuencias en la tarjeta de video, dos de cuatro segundos, que sólo muestran a William Cárdenas en el suelo, y una de 19 segundos, que es donde se observan los golpes en el rostro del detenido.
"Después llegó un policía tratando de explicarme lo que pasó, que se trataba de un delincuente y que lo habían tratado de encontrar por mucho tiempo, pero que había querido huir", contó a La Opinión la autora del video. "Después llegó un hermano del hombre arrestado y me dijo que iba a poner una queja en contra de la ciudad por lo que le habían hecho a su hermano y le di una copia a la familia. Ya después no supe cómo apareció en internet".
Además de los gritos de que no podía respirar, en la grabación también se alcanzan a escuchar algunas voces de testigos de la detención, que les reclamaban a los policías del LAPD por los puñetazos que le daban a Cárdenas.
Kwaku Duren, abogado de Cárdenas, comentó que fue él quien decidió colocar el video en internet ante la negativa de las autoridades de negociar un arreglo para no ir a una demanda civil.
Reconoció que lo que hizo su cliente al intentar huir estuvo mal, pero que eso es un delito menor que no merece el excesivo abuso de la fuerza policiaca.
El defensor presentó una serie de fotografías en las que se observan las lesiones que sufrió Cárdenas y por las cuales tuvo que ser hospitalizado, según dijo.
Actualmente William Cárdenas se encuentra preso en el Centro de Detención de Pitchess, y el próximo 27 de noviembre se presentará a juicio por resistirse al arresto.
De acuerdo con Duren lo anterior es un delito menor.
Y advirtió el abogado: "Vamos a demandar al LAPD por uso excesivo de la fuerza".
